Los disléxicos tienen dificultades para aprender a leer: los libros pueden ser rápidamente demonizados y el tiempo de lectura puede convertirse en una verdadera limitación. Pero si elige el libro adecuado, podrá invertir la tendencia y acabar con sus temores. En nuestras actividades de tutoría, fomentamos mucho la lectura para disléxicos : descubra nuestros consejos para hacer a los disléxicos el mejor regalo de todos…
¿Por qué regalar un libro a un niño disléxico?
Un libro es un objeto que evoca sentimientos, emociones, pensamientos y conocimientos en su lector. Más allá del simple placer de hojearlo, de mirar sus imágenes, de palpar sus páginas, para luego leerlo y compartir sus historias, exige ser cuidado, como un edredón herido al que hay que proteger de peligros y riesgos de todo tipo.
Como refugio o lugar de escape, los libros proporcionan acceso a los lugares reconfortantes y enriquecedores que tanto aprecian los niños (especialmente los niños disléxicos). A medida que crecen, desarrollan un verdadero apego al objeto, ya sea porque se lo regaló alguien muy querido para ellos, porque cuenta una historia con la que se identifican, o porque simplemente es bonito o divertido, etc.
Teniendo en cuenta estos argumentos irrefutables, ¿cómo se puede excluir a los niños disléxicos de esta riqueza de recursos con el único pretexto de que tienen dificultades para leer? La mejor solución es simplemente elegir los libros que necesitan…
Nuestros 5 consejos para elegir bien
Consejo 1: ¡Cultive el placer!
Sea cual sea su edad, los niños con dislexia siguen siendo niños que se divierten: ¡aproveche sus intereses (Star Wars, princesas, dragones, hadas, etc.)! Si el tema les cautiva, es más probable que se mantengan concentrados y motivados.
Consejo 2: ¡Elige libros ilustrados con ritmo!
Además de sus intereses, anime a los niños disléxicos a seguir las páginas y la historia con ilustraciones. Quizá empiecen por imaginarse la historia visualizándola, antes de mirar el texto para comprenderla mejor… Elige un libro con frases y párrafos cortos y capítulos breves, en el que la acción desempeñe un papel predominante.
Consejo nº 3: Varíe los medios y los géneros.
Cree una sorpresa y despertar la curiosidad de un niño disléxico llevándole a ver libros en la biblioteca. literatura clásica (los Cuentos del Gato Encaramado, Tartarín de Tarascón…), sino también hacia la mangas tiras cómicas documentales o revistas especializadas sobre sus aficiones… Piense también en la audiolibros para cultivar el deseo y el placer…
Consejo 4: Comparta sus sentimientos con su hijo
Hablar con la familia sobre un libro permite a los niños disléxicos compartir las emociones que han experimentado al leerlo. Estos momentos especiales contigo también les animan a descubrir un nuevo libro, y a venir a hablarte de él después.
Consejo 5: Elija colecciones para disléxicos
Hoy en día, hay editoriales que ofrecen colecciones dedic adas a los niños disléxicos, algunas de ellas diseñadas con la ayuda de profesionales de la salud (como logopedas). Al igual que la colección “Le club des dys “, que destaca los sonidos complejos, la colección “Mes premières lectures faciles“ alterna los colores de las líneas. Pero también está la colección “Les Mots à l’endroit”, “Délie mes mots”, “Dyscool”, “Au cœur de l’Aventure” donde el niño disléxico es el héroe, etc.